sábado, 11 de mayo de 2019

Comentario lectura evangelio 12/05/19

No somos nosotros los que primero le hemos elegido a Dios, ha sido Dios el que primero nos ha elegido a nosotros, no somos nosotros los que primero le hemos amado a Él, sino que ha sido Él el que primero nos ha amado a nosotros. Por eso, somos su pueblo y ovejas de su rebaño. El saber que somos de la familia de Dios, sus hijos, es, evidentemente, un gran honor para nosotros, pero no olvidemos que es también una gran responsabilidad. Si queremos ser de verdad y parecer de hecho de la familia de Dios, deberemos portarnos y comportarnos como verdaderos hijos de Dios, hermanos de Jesús de Nazaret, siempre mansos y humildes de corazón con todos nuestros hermanos. Él no vivió, ni murió para sí, sino para darnos vida y librarnos de la muerte a nosotros. También nosotros deberemos vivir para los demás, sobre todo para los más débiles y necesitados, dándoles vida y rompiendo las cadenas injustas que les esclavizan y les atan a la muerte social o sicológica. El Señor es bueno, su misericordia es eterna, su fidelidad por todas las naciones nos dice el salmo. Vamos a intentar nosotros ser buenos hijos de tan buen Señor.

(Fuente nocetnam: Gabriel González del Estal)

No hay comentarios:

Publicar un comentario